¿Todavía no has vendido tu vivienda? Quizás no la estás dejando en las manos de profesionales. Vender tu propiedad no es una tarea fácil. Necesitas tener mucha paciencia y persistencia, así como un buen conocimiento sobre el proceso. No es suficiente saber cómo vender tu propiedad, también hace falta saber qué permisos y documentos se necesitan.
En ocasiones todo este papeleo puede resultar muy tedioso, e incluso los plazos se pueden ver ampliados por falta de documentación. Por este motivo, es conveniente contar con una inmobiliaria que sea quien se encargue de toda la gestión. Además, así te asegurarás de que todo se realice correctamente y no se queden tareas en el aire.
Para poder vender tu propiedad, primero necesitarás un contrato con el comprador. El contrato debe incluir información como el precio de venta, la fecha de la venta y otros detalles sobre la transacción. También debe incluir información sobre lo que sucede si hay algún problema o desacuerdo entre ambas partes, durante o después de la venta de la propiedad.
El siguiente paso es obtener la aprobación de tu banco para un préstamo hipotecario que cubra todos los gastos relacionados con la compra de esta propiedad (el depósito, los honorarios legales, etc.). Puedes obtenerlo en cualquier momento antes o después de firmar un contrato de arras con un comprador.
Te ahorran tiempo y dinero
El agente inmobiliario será el encargado de realizar todos los trámites necesarios. De manera que solo tengas que ocuparte de firmar los documentos. Asimismo, ahorrarás tiempo, ya que las inmobiliarias tienen una visión más amplia acerca del sector. Inclusive, conocen los precios reales del mercado y de otras viviendas de la zona a la perfección.
Ya cuentan con una cartera de clientes
Las inmobiliarias disponen de un amplio conocimiento del mercado y pueden garantizarte la venta en un corto período de tiempo, ya que ya cuentan con una cartera de clientes interesados en comprar. Además, sus relaciones con los clientes son más fluidas y eficaces, de manera que te beneficiará más que si tuvieras que vender la propiedad por tu cuenta.
Es más, los profesionales de las inmobiliarias son grandes negociadores por lo que siempre intentarán sacar el mayor beneficio para ambas partes de la operación de compra-venta.
Se trata de un acuerdo en el que a ambas partes, tanto al vendedor como al comprador, les interesa obtener beneficios. Por esta razón, los agentes inmobiliarios utilizan todo tipo de estrategias para vender la vivienda.
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